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El concepto de Zaguán surge de la arquitectura andaluza, donde este espacio actúa como un punto de transición entre el exterior y el interior de una vivienda, equilibrando luz, sombra y frescura. En este proyecto, el zaguán se reinterpreta en una cocina que fusiona el confort del hogar con la apertura al entorno, integrando materiales nobles, tecnología avanzada y una distribución que maximiza la conexión con la naturaleza. La fluidez espacial, la continuidad visual y la versatilidad funcional permiten que la cocina se adapte tanto a momentos de intimidad como a reuniones sociales, reflejando el estilo de vida sofisticado y dinámico de Alejandro y Sofía, los usuarios hacia quienes van este proyecto; una pareja sofisticada, amante de la gastronomía, la tecnología y el diseño. Valoran el confort, la conexión con la naturaleza y los espacios versátiles para socializar y disfrutar en privado.